miércoles, 20 de agosto de 2008

Ruta nocturna del 16 de Agosto de 2008

Nocturna, ¿qué es una ruta nocturna?.

Una ruta nocturna es algo especial, por este motivo se suelen unir al grupo habitual personas que no salen con nosotros, porque es una ruta en la que nos olvidamos del calor de las salidas mañaneras ya que no está “el rubio” cascando en lo alto, nos olvidamos de alcanzar altas medias de velocidad porque lo que importa es compartir unos kilometritos y unas viandas que cada cual aporta. Pues bien una vez hecha esta introducción os relato como aconteció la “Nocturna de Agosto de 2008”:

Habíamos quedado a las 22:30 horas del 16 de agosto de 2008, allí nos personamos todos los que teníamos ganas de poder pasar un rato agradable.

Nocturna y eclipse total de luna no suelen ser compatibles, pero ¿quién se había enterado que había un eclipse?, pues está claro que ninguno de los componentes del grupo se había enterado del hecho hasta que los noticiarios nacionales se hicieron eco de la noticia en la edición de mediodía, y así nos lo hizo saber Zapa con un mensajito al móvil. Pero....... ¿qué más da?, probemos a salir con eclipse a ver que pasa. ¿No hemos salido con nieve?, ¿con niebla?, ¿ con ocho grados bajo cero?, ¿qué es un eclipse de luna para los Appleres?.

Con estos datos de arrancada nos dirigimos hacia la vecina localidad de Llanos pues así habíamos quedado y convenido. A la altura del Polígono Industrial, buscando la conexión con la Cañada Real Soriana que nos llevaría hasta nuestro destino, alguien tuvo necesidad de “soltar lastre liquido corporal” y una vez que estábamos parados ¿por qué no hacemos un avituallamiento?. Allí comenzaron a aparecer las cuatro tortillas de patatas, latas de mejillones, una caja de langostinos, un queso (¡¡como estaba el queso!!), litronas, vino (de calidad, muy bueno si señor), empanada gallega, empanadillas, pisto manchego, etc., etc., etc.. Por cierto el Vigilante de Seguridad del Polígono seguro que se mosqueó un poco.

Una vez repuestos del esfuerzo que supuso pedalear desde el Parque de Bomberos hasta el Polígono Industrial nos encaminamos hacia la Cañada Real Soriana no sin antes cruzarnos nuevamente con el Vigilante de Seguridad que seguro que pensó “¡¡aonde van estos locos!!”.

Llegados a la Cañada Real la verdad es que ver lo que se dice ver era poco, el eclipse lunar estaba en su punto más álgido, aunque apagamos las luces de las bicicletas para intentar que nuestros ojos se adaptasen a la falta de luz. Parece mentira pero aún con la poca luz que conseguía dar la Diosa de la Noche, nuestros ojos fueron capaces de adaptarse a esa falta de luz y se podía circular con normalidad aunque con mucha mucha mucha precaución. Destacar que a pesar de la precaución Zapa tuvo un percance al colisionar con la bicicleta que le precedía. Si es que ya lo dice la DGT, hay que guardar la distancia de seguridad. Evidentemente Zapa se fue al suelo aunque dado que la velocidad que se desarrolla en este tipo de rutas es bastante baja no hubo que lamentar daños considerables, algún rasponcejo y por supuesto “el orgullo”.

Para evitar cruzarnos con los fieros guardianes de los “Ferrallás”, tomamos una ruta alternativa que va paralela a la Cañada Real y que pasa al lado de LA SEDE que utilizamos para nuestras celebraciones cumpleañeras. Al poco de pasar por ella tuvimos que hacer otro avituallamiento porque el esfuerzo que llevábamos realizado ya nos hacía pensar que podíamos estar próximos a tener una “pájara”, y ya se sabe que los deportistas ante todo han de alimentarse e hidratarse concienzudamente en su esfuerzos deportivos. En este nuevo avituallamiento volvieron a salir los víveres que cada cual llevaba.

Repuestos de sólidos y líquidos nos encaminamos a nuestro destino pues ya quedaba poco terreno que recorrer.

Llegados a Llanos nos dirigimos hasta la Plaza del Mercado donde sacamos las viandas que quedaban y repusimos mas líquidos que sólidos ya que los sólidos habían sido casi todos finiquitados en los dos avituallamientos. Mencionar la amabilidad de Alfonso Velázquez, dueño del Bar que está situado en esta plaza y que amablemente, y aunque estaba cerrando su negocio, nos sirvió cafés con hielo para acompañar nuestra “juerga”. Reseñar que estábamos llegando a Llanos en torno a las 1:30 horas.

Una vez terminado el avituallamiento nos volvimos a montar en nuestras máquinas para volver a Manzanares. En la vuelta la verdad es que vinimos bastante mejor, el eclipse había pasado y los ánimos venían “calentitos” con lo que tardamos algo menos que en la ida porque al final del trayecto hubo algunos sanos piques entre los componentes de la aventura.

Al llegar a Manzanares dimos una vueltecita por la localidad para ver donde podíamos reponer líquidos, encontrando “abierto”, mas bien cerrando, uno de los bares del Paseo Principe de Asturias, donde nos sirvieron un “mini” de cerveza por cabeza y misteriosamente uno de los componentes del grupo sacó ¡¡¡otra caja de langostinos!!!, jooooer ¡¡¡como nos vamos a poner!!!.

Siendo las 4:00 de la madrugada del Domingo 17 se disolvía la reunión ciclista aunque sobró algo de langostinos que el Estilista se encargó de echar en su mochila.

Espero que estos datos hayan sido bastante fieles a lo acontecido en esta noche, aunque si alguno quiere matizar o modificar algún dato porque me haya equivocado, puede poner un comentario y modificar lo que se estime conveniente. También se acompañan las fotos de este magno acontecimiento.
nocturna agosto 2008

Saludos bikers.

No hay comentarios: